lunes, 22 de abril de 2019

INDICE LIBROS / COMICS


  • EVARISTO PÁRAMOS PÉREZ “Qué Dura es la Vida del Artista. Un Anecdotario de la Polla Records"
  • LAS LETRAS DE IRON SAVIOR
MIGUEL B. NÚÑEZ “HEAVY Los chicos están mal”
MIGUEL B. NÚÑEZ “Heavy 1986”
XCAR “El Richal, Soltero y Metalero”
ANDRÉS LÓPEZ MARTÍNEZ “Cuerdas de Acero. Historia del Heavy Metal en España"

EVARISTO PÁRAMOS PÉREZ “Qué Dura es la Vida del Artista. Un anecdotario de LA POLLA RECORDS”


(Disacorde edicones)

Quizá sin pretenderlo, la publicación de este libro ha servido para calentar el ambiente de cara a la breve gira de reunión de La Polla Records que tendrá lugar en unos meses. El viejo Evaristo, en los años 80 también conocido como El Flipas, uno de los tipos más singulares de la historia del rock patrio, recopila una carcajeante sucesión de anécdotas experimentadas, o más bien sufridas, a lo largo de los 24 años que duró la trayectoria de la banda número uno del punk nacional.

No puede decirse que se trate de una biografía, porque aunque parece haber cierto orden cronológico, la verdad es que en varios momentos se avanza o se retrocede en el tiempo, y veces las historias se agrupan por temáticas. Por otro lado la memoria no parece ser el punto fuerte del señor Páramos, puesto que en varias ocasiones cuenta aventuras incompletas, bien porque no recuerda el dónde o el cuándo, bien porque él mismo reconoce que el uso de ciertas sustancias le borró en su momento lo ocurrido durante horas o días.

De todo el conjunto se pueden sacar una serie de conclusiones. La primera, es que el éxito conseguido por unos patanes  procedentes de los ámbitos rurales más profundos y carentes de las más mínimas nociones musicales, es un misterio para ellos mismos. El hecho de que se auto apodaran como “comando Martínez Soria” lo dice todo. La segunda, que la precariedad y la cutrez son una constante en la historia de la música, tanto dentro como fuera de nuestras fronteras. La tercera, que en el negocio musical en cuanto se genera cierto dinero todo el mundo intenta estafarte. El Flipas se queda bien a gusto sacando a la luz las vomitivas maniobras de las que fueron objeto durante años. De hecho, entre la lista de sus representantes sólo hay dos que se salvan del ajuste de cuentas de Evas, y estos son Kike Factory y Manuel, con quien sigue hoy día en Gatillazo. El resto, una sucesión de incompetentes, timadores y aprovechados. Los ataques son especialmente virulentos contra el sexto Polla Records o el Polla Records fantasma. En todas las entrevistas de los 80 decían que el grupo eran seis, pero evidentemente los músicos eran cinco. Se referían a su técnico de sonido y pseudo mánager, un tipo tan despreciable que Evaristo le represalia con el mayor de los castigos, el olvido. Muchas veces cuenta sus barrabasadas, pero a propósito no dice su nombre ni una sola vez.

Lamentablemente, no todo lo que cuenta el Flipas se puede considerar fiable. Primero porque falta conocer las versiones de las otras partes, y segundo, porque como ya hemos dicho, él es el primero en reconocer que las drogas y el paso del tiempo no son buenos ingredientes para su memoria. Por ejemplo, siempre tuvieron fama de informales y de incumplidores, y algunos de los sucesos relatados parecen confirmarlo. Evaristo también se atribuye el papel de “vaselina” dentro del grupo, para evitar roces. Otras fuentes nos dicen que ese puesto en realidad lo desempeñó el batería Fernando, y como prueba irrefutable está el hecho de que su fallecimiento significó la disolución de la banda.

De cualquier modo, este libro es lectura obligada, no sólo para el público rockero, sino para todo el mundo, por una razón de incuestionable peso: es un descojone. Muchas de las anécdotas ya son divertidas de por sí, pero además la forma que tiene Evaristo de contarlas, y más aun de comentarlas, son desternillantes. Todos los que han podido hablar con él o escuchar alguna de sus entrevistas que proliferan por youtube ya saben de lo que hablamos. No es recomendable leer  esta obra en un transporte público si no quieres convertirte en el blanco de todas las miradas, porque es muy difícil contener las carcajadas, y lo decimos por experiencia personal. Tanto si eres fan de La Polla o de Evaristo, como si te interesa el funcionamiento de los entresijos del negocio musical, como si todo esto te importa tres pepinos, tienes que leer esta obra sí o sí, porque de lo contario te perderás muchos buenos ratos y muchísimas risas.

Nacho Jordán